Uso y control del PNEUMO SURE High Flow Insufflator en el modo operativo High Flow
Uso conforme a las prescripciones
ES
Contraindicaciones
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Uso y control del PNEUMO SURE High Flow Insufflator en el
modo operativo High Flow
El PNEUMO SURE High Flow Insufflator se utiliza para crear una cavidad median-
te la insuflación de CO2 durante el diagnóstico y/o la laparoscopia terapéutica. El
modo operativo High Flow está previsto explícitamente para la laparoscopia de
pacientes con un peso normal y un ligero sobrepeso (BMI< 30 kg/m
14 años. En el modo operativo High Flow, el insuflador limita la presión a un
máximo de 30 mm Hg y la tasa de flujo de gas, a un máximo de 40 l/min. El apa-
rato mide la presión en el abdomen continuamente o en intervalos de tiempo
cortos, y compara la presión nominal con la presión real existente en el abdomen.
La función del aparato es mantener la presión nominal. En caso de sobrepresión
en el abdomen, el sistema automático de descarga reduce la presión abdominal
hasta la presión nominal prefijada.
El aparato no se puede emplear para llenar el abdomen con CO2 si una laparos-
copia está contraindicada. Respete además las instrucciones de manejo de su la-
paroscopio en relación a las contraindicaciones absolutas y relativas. El aparato
no está indicado para la insuflación histeroscópica, es decir, no está permitido
usarlo, p. ej., para dilatar la matriz.
Durante la laparoscopia a neonatos o a pacientes de menos de 25 kg de peso cor-
poral no está permitido utilizar un flujo de gas superior a los 14 l/min.
6.1
Peligros específicos del aparato en caso de aplicación del PNEU-
MO SURE High Flow Insufflator en el modo operativo High Flow
PELIGRO
Reacciones idiosincráticas
En pacientes con anemia drepanocítica o insuficiencia pulmonar, aumenta el
riesgo de que se produzca un desequilibrio metabólico debido a la mayor absor-
ción de CO2.
PELIGRO
Absorción de CO2
Durante la insuflación se realiza una absorción de CO2 (intravasación). En este
proceso, el cuerpo absorbe una parte del CO2 usado para la insuflación. Una con-
centración excesiva de CO2 en sangre o en las vías respiratorias puede conllevar
en casos extremos la muerte del paciente. Por ello, durante todo el proceso de in-
suflación, observe con especial atención las funciones vitales del paciente y ase-
gúrese de que éste puede respirar bien. Una respiración suficientemente buena
puede atenuar o evitar problemas con el CO2. La presión o el flujo de gas eleva-
dos facilitan la absorción de CO2. Puede llenar suficientemente el abdomen con
una presión entre 10-15 mmHg. Los valores de presión superiores a 15 mmHg
son necesarios sólo en pocos casos, pero hacen aumentar el riesgo de una intra-
vasación. No está permitido sobrepasar una presión intraabdominal superior a
30 mmHg.
PELIGRO
Reacciones cardíacas y metabólicas
Cuando se insufla CO2 existe el peligro de que se produzca una acidosis metabó-
lica. El resultado pueden ser irregularidades cardiológicas. Esto podría manifes-
tarse de las siguientes maneras:
• reducción de la respiración con función reducida del diafragma
• hipercapnia
• reducción del reflujo venoso
• reducción del volumen cardíaco por minuto
• acidosis metabólica
2
) mayores de