En caso de emergencia
A pesar del mantenimiento regular de acuerdo al programa de mantenimiento y un funcionamiento perfecto,
pueden producirse averías que deben ser reparadas antes de que la embarcación pueda continuar la travesía.
En este capítulo se presentan sugerencias para reparar algunas de las posibles averías.
Existen funciones de seguridad que son activadas para proteger el motor cuando ocurren determinadas averías.
Es posible que se den las siguientes situaciones:
•
El motor no arranca.
•
Palanca de cambio en punto muerto y régimen de motor limitado a 1.500 r.p.m., no hay gobierno.
•
El motor se para.
Si hay una falla, confirmar la alarma y tomar las medidas recomendadas. Véase este capítulo y Gestión de
alarmas, en la pag. 65.
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Si uno o dos motores dejan de funcionar o funcionan
con régimen reducido, no utilizar los motores con el
acelerador totalmente abierto o a regímenes altos por
periodos prolongados, a menos que la situación lo
exija. En tal caso, la carga en el motor o motores en
funcionamiento será mucho más alta de lo que es
normalmente cuando funcionan todos los motores, lo
cual puede producir un desgaste excesivo en el motor
o los motores y en el propulsor o los propulsores.
Hacer funcionar la embarcación a velocidad baja
(máximo 10 nudos, 11,5 millas/h) al puerto más
cercano para su reparación.
Instalación con tres motores
Es poco probable que una embarcación con tres
motores tenga una avería sería a la vez en todos los
motores y propulsores. Si se produce una avería grave
que impide el funcionamiento normal de uno o dos
motores y un propulsor o más propulsores, es posible
maniobrar la embarcación hasta su destinación con
las palancas de mando y el timón.
Si los motores y los propulsores en cada lado (1 y 3)
funcionan, es posible manejar la embarcación con el
joystick.
Hacer funcionar la embarcación a velocidad baja
(máximo 10 nudos, 11,5 millas/h) al puerto más
cercano para su reparación.
Encallado
Si la embarcación ha varado en tierra o en un objeto,
de forma que haya podido dañarse alguno de los
propulsores o las hélices, la embarcación debe
manejarse a velocidad baja o remolcarse hasta el
puerto más cercano. Sacar la embarcación del agua y
encargar a un taller de servicio oficial Volvo Penta la
inspección de los propulsores y las hélices. Los daños
no detectados pueden causar daños graves en el
propulsor dañado.
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