Ajuste del contrapeso
Antes de cada proceso de colado ha de ajustarse el contrapeso al tamaño de los cilindros. Sólo de
esa manera queda garantizada una marcha regulada del aparato.
Un contrapeso no ajustado correctamente puede causar fuertes vibraciones y así una
dislocación del aparato.
Las posiciones de enclavamiento del brazo centrifugo están armonizadas con el sistema de
cilindros DeguDent (1x, 3x, 6x, 12x). Para cambiar el contrapeso se aprieta el pulsador de
retención y se desplaza el peso con el pulsador de retención apretado hasta alcanzar la posición
deseada. Tengan cuidado que el contrapeso enclave en la posición elegida, o sea, el pulsador de
retención asome otra vez del contrapeso.
Un contrapeso no retenido puede desajustarse sin control y así ocasionar fuertes
vibraciones y de tal manera una dislocación del aparato.
En posición enclavada puede realizarse un ajuste fino del contrapeso elevando y girando el anillo
de ajuste exterior (véase imagen 2). Tenga cuidado que el anillo de ajuste enclave debidamente en
la posición preludia.
Para cilindros de fundición pesados o grandes cantidades de aleaciones pueden elegirse las
posiciones +1 y +2, para cilindros ligeros o pequeñas cantidades de aleaciones pueden elegirse
las posiciones -1 y -2. La lectura se efectúa en el eje central del brazo centrífugo.
Colado con el brazo centrífugo para la fundición con soplete
Elija un número de revoluciones de colado que corresponda al objeto de colado. Puede variarse el
número de revoluciones entre 350 revoluciones/min y 450 revoluciones/min. Utilizando
revestimientos ligados por fosfato recomendamos un número de 450 revoluciones/min. A causa de
la resistencia inferior a la presión debería emplearse un número de revoluciones inferior, por ej.
350 revoluciones/min, si se utilizan revestimientos ligados por yeso. Para ello ha de pulsarse la
tecla correspondiente de la parte de mandos. El número preelegido de revoluciones será indicado
mediante un diodo luminoso en el teclado.
Gire el brazo centrífugo en una posición delante de la caja que garantice que los gases
calientes que suben no puedan acumularse en la caja.
El soporte para cilindros, el trineo para crisoles así como las partes vecinas se calientan
mucho al fundir con soplete. Aparte de esto la caja también puede calentarse dependiente
de la posición del brazo centrífugo, la regulación del soplete así como el tiempo de acción
térmica de la llama.
De ninguna manera deben tocarse sin protección las partes que pueden calentarse
fuertemente durante el proceso de trabajo. Existe el peligro de quemaduras.
A la primera puesta en servicio el brazo centrífugo y el aislamiento de la caja pueden causar
molestias por olores. También es posible un descoloramiento del aislamiento de la caja.
Coloqúese el molde de fundición y corríjase en caso necesario correspondientemente la altura del
soporte para cilindros según el tamaño de los cilindros de fundición mediante el desplazamiento
vertical del brazo centrífugo.
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