DESCRIPCIÓN DEL FUNCIONAMIENTO (véase esquema n° 0002900600)
Cierre el interruptor del quemador y si los termostatos de regulación y de seguridad lo permiten, la corriente llega
a la caja de control y con ello se conecta el motor y el transformador de encendido.
El motor hace girar el ventilador y éste, con el aire que produce, efectúa el prebarrido de la cámara de combustión;
al mismo tiempo, la bomba del combustible genera una circulación en los conductos y expulsa las posibles
burbujas de gas a través del retorno. Durante la fase de prebarrido el motor que acciona la clapeta del aire de
combustión abre dicha clapeta en la posición de segunda llama (prebarrido con aire abierto).
A continuación, la clapeta del aire se vuelve a colocar en la posición de primera llama a causa del arranque del
quemador. Esta fase de prebarrido termina con el cierre de la electroválvula «1» (abierta en la posición de
reposo) y con ello se interrumpe la descarga libre del gasóleo en el tanque. Como consecuencia del cierre de la
electroválvula «1», aumenta la presión en los conductos de impulsión.
Cuando la presión alcanza el valor de 7 bares se abre la válvula mecánica que se encuentra en el grupo pulverizador
y, por lo tanto, el gasóleo llega a la boquilla de la primera llama. A continuación el combustible sale del grupo
pulverizador hacia la cámara de combustión pulverizado finamente. La presión se estabiliza al valor de unos 10
bares, que corresponde al valor de regulación del regulador de presión de la primera llama.
El gasóleo pulverizado sale de la boquilla y se enciende debido a la descarga que se ha producido entre los
electrodos desde que el motor se ha puesto en marcha. Si aparece una llama constante, el programador supera
la posición de bloqueo, conecta el motor y éste acciona la clapeta del aire de combustión y la coloca en la
posición de segunda llama.
Durante esta operación, una leva regulable que se acciona con el mismo motor de la clapeta cierra un contacto
eléctrico que lleva corriente a la electroválvula «2» y corta el flujo del gasóleo mediante el regulador de presión de
la primera llama.
De este modo se desconecta el regulador de presión de la primera llama y la presión aumenta
hasta el valor al que se ha fijado el regulador de presión incorporado en la bomba (16 bares).
La presión de 16 bares también mueve la válvula mecánica, que hasta una presión de 13 bares impide la entrada
del combustible en la segunda boquilla. Así, la válvula mecánica se abre a causa de la presión existente y la
segunda boquilla también empieza a funcionar. Ahora las dos boquillas operan a una presión de 16 bares
Cuando el aparato trabaja a la presión de 16 bares se halla en el caudal máximo.
NOTA: A partir de lo que acabamos de explicar es evidente que para elegir las boquillas, en función del caudal
total deseado (2 boquillas en funcionamiento), es preciso tener en cuenta el valor de caudal correspondiente
a la presión de trabajo de 16 bares del gasóleo. De todos modos, tenga en cuenta que cuando el quemador
trabaja con sólo la primera llama, el valor del caudal del combustible de la primera boquilla corresponde a
los valores indicados en la tabla, en la columna que hace referencia a una presión de 10 bares, porque el
regulador de la presión de la primera llama está regulado a este valor. Sin lugar a dudas, existe la posibilidad
de variar la relación entre la primera y la segunda llama dentro de unos límites muy amplios, substituyendo
las boquillas. De todas formas, tenga en cuenta que para obtener un buen funcionamiento, el consumo de
combustible con la primera llama no debe ser inferior al caudal mínimo para el modelo en concreto (véase
valor indicado en la placa) . Si hubiera un caudal inferior, se haría difícil el arranque y la combustión sólo
con la primera llama podría no ser buena.
Desde el momento en que aparece la llama en la cámara de combustión, la fotorresistencia y los termóstatos
controlan y dirigen el quemador. La caja de control prosigue con el programa y desconecta el transformador de
encendido; de este modo, el quemador está encendido con funcionamiento a pleno régimen.
Si el programa se interrumpe durante la fase de prebarrido (falta de tensión, intervención manual, intervención
del termóstato, etc.) el programador vuelve a su posición inicial y repite automáticamente la fase de encendido
del quemador. Cuando la temperatura o la presión en la caldera alcanza el valor al que hemos regulado el
termóstato/presostato, éste dispositivo interviene y para el quemador.
El aparato se vuelve a poner en marcha automáticamente cuando el valor de la temperatura o la presión ha
disminuido suficientemente. Si por algún motivo hubiera ausencia de llama durante el funcionamiento, la
fotorresistencia interviene de inmediato (en un segundo), interrumpe la alimentación del relé homónimo provocando
la abertura del mismo y, por lo tanto, se desconecta la electroválvula del barrido. Al abrirse la electroválvula se
descarga rápidamente la presión existente y la pulverización del gasóleo pulverizado se corta debido al cierre
automático de la válvula del grupo pulverizador cuando la presión está por debajo de los 7 bares.
En este caso, se repite automáticamente la fase de encendido y, si la llama se enciende correctamente, el
quemador vuelve a funcionar con normalidad. De no ser así (llama irregular o ausente) el aparato se para en
bloqueo.
39