Recordamos ahora que es preferible, para la pequeña llama, li-
mitar la cantidad de aire al estrictamente indispensable para te-
ner un encendido seguro incluso en los casos más dificultosos.
CONTROLES
Una vez encendido el quemador es necesario controlar los dispositi-
vos de seguridad (detector de llama, de bloqueo, termostatos).
1) El dispositivo de control de la llama, debe ser capaz de intervenir
durante el funcionamiento, en el caso de que la llama se apague
(este control debe ser efectuado pasado al menos 1 minuto
desde que se haya producido el encendido).
2) El quemador debe ser capaz de ponerse en bloqueo y per-
manecer así cuando, durante la fase de encendido y en el
tiempo preestablecido por el aparato de mando, no aparece
normalmente la llama. El bloqueo comporta la parada in-
mediata del motor y, por tanto, del quemador, y el encen-
dido del correspondiente indicador luminoso de bloqueo.
Para controlar la eficiencia del detector de la llama y del blo-
queo, proceder del siguiente modo:
a) Poner en funcionamiento el quemador.
b) Pasado al menos un minuto del encendido extraer
el detector de la llama sacándolo de su alojamiento,
o s c u r e c e r l o s i m u l a n d o a s í l a f a l t a d e l l a m a .
(cerrar con un trapo la apertura del detector de
la llama. La llama del quemador debe apagarse así.
El aparato en el tiempo determinado por el programa, entra
en bloqueo. Desbloquear el aparato sólo con la intervención
manual presionado el pulsador correspondiente.
3) Para controlar la eficiencia de los termostatos, se hace funcio-
nar el quemador hasta que el agua de la caldera alcanza la
temperatura de al menos 50° C, y por seguidamente,
se acciona el botón de mando del termostato en el sen-
tido de bajar la temperatura hasta advertir el chasquido
de apertura y al mismo tiempo la parada del quemador.
El chasquido del termostato debe producirse con una desvia-
ción máxima de 5 ÷ 10° C con respecto al termómetro de
control (termómetro de la caldera) en caso contrario modificar el
calibrado de la escala del termostato haciéndola corresponder
con la del termómetro.
REGULACIÓN DEL AIRE EN EL CABEZAL DE COM-
BUSTIÓN
El cabezal de combustión cuenta con un dispositivo de regulación
E
que permite abrir o cerrar el paso del aire entre el disco y el ca-
bezal. Cerrando el pasaje, se lograr obtener así una alta presión
S
anterior al disco, incluso con caudales bajos. La alta velocidad y
la turbulencia del aire permite una mejor penetración del mismo
P
en el combustible y, por tanto, una óptima mezcla y estabilidad de
A
la llama. Puede ser indispensable contar con una alta presión del
aire antes del disco, condición prácticamente obligatoria cuando el
Ñ
quemador trabaja en una cámara de combustión presurizada y/o
con una carga térmica elevada.
O
A partir de lo anterior, es evidente que el dispositivo que cierra el
paso al aire del cabezal de combustión debe regularse de manera
L
que siempre la presión de aire detrás del disco sea siempre ele-
vada. Se aconseja realizar una regulación para cerrar el aire del
cabezal, de modo de requerir una apertura crucial de la clapeta de
aire que regula el flujo a la aspiración del ventilador del quemador.
Obviamente esta condición se debe verificar cuando el quemador
funciona al máximo caudal deseado.
Prácticamente, se debe iniciar la regulación con el dispositivo
que cierra el aire en el cabezal de combustión en una posición
intermedia, encendiendo el quemador para obtener una regulación
orientativa como se expuso anteriormente.
Cuando se alcanza el caudal máximo deseado se debe corregir la
posición del dispositivo que cierra el aire en el cabezal de combu-
stión, moviéndolo hacia delante o hacia atrás, para obtener un flujo
de aire adecuado al caudal, con la válvula de aire de aspiración
sensiblemente abierta.
MEDICIÓN DE LA CORRIENTE DE IONIZACIÓN
Para medir la corriente de ionización, quitar el puente de los
bornes 30-31 del circuito impreso con el quemador apagado
(véase el dibujo). Conectar a los mismos bornes los terminales
de un microamperímetro de escala adecuada y volver a encender
el quemador. Una vez que haya aparecido la llama, será posible
medir el valor de la corriente de ionización, cuyo valor para
asegurar el funcionamiento del aparato debe ser superior a 3 µA.
Terminada la medición, volver a poner el puente que se ha
desconectado con anterioridad.
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