Alemania se deben respetar las directrices del seguro social alemán
de accidentes (DGUV) 112-198 y 112-199, así como la normativa
para la prevención de accidentes laborales local y del sector. En otros
países se deberán observar las normativas de seguridad laboral
nacionales correspondientes. El equipo de protección para el ascenso
solo debe ser utilizado por personas que hayan sido instruidas en lo
referente a un uso seguro y que tengan los conocimientos adecuados.
No se permite el ascenso en condiciones físicas que puedan poner
en peligro la seguridad del usuario en circunstancias normales y en
caso de emergencia. Antes de cada uso, se debe inspeccionar
visualmente el estado adecuado del sistema de protección para el
ascenso y de los EPI utilizados. Tenga en cuenta los peligros y las
posibles alteraciones del funcionamiento por el efecto de bordes
afilados, temperatura, productos químicos, conductividad eléctrica,
cortes, abrasión, luz UV y otras condiciones climáticas. En caso de
vender el equipo de protección para el ascenso en el extranjero, el
revendedor deberá proporcionar las instrucciones de uso,
mantenimiento, inspección periódica y reparación en el idioma del
comprador. El arnés de sujeción debe estar siempre bien ajustado
para garantizar una fijación perfecta. El arnés de sujeción nunca debe
quedar suelto. Si durante el ascenso o descenso se soltara el arnés,
este se deberá reajustar correctamente desde una posición segura.
¡ATENCIÓN! ¡PELIGRO DE MUERTE! Está prohibido aumentar
o acortar la longitud de la pieza de unión añadiendo o retirando
algún elemento de conexión. Las correderas solo se podrán utilizar
bajo las condiciones establecidas y con los fines previstos. Deje de
utilizar inmediatamente los dispositivos y equipos de seguridad y
protección deteriorados o que hayan soportado una caída. Encargue
su revisión a un técnico especializado o al fabricante. Las correderas
forman parte de un equipo de protección individual y únicamente
deberán ser utilizadas por una persona determinada. El equipo
deberá ser revisado inmediatamente por un técnico especializado y,
si fuera necesario, reparado por el fabricante en caso de que una
corredera haya sufrido algún daño por una caída o por otras razones,
el amortiguador de cinta esté roto o no esté provisto de su cubierta
protectora, el indicador (rojo) no esté visible en el mosquetón, no se
hayan realizado la inspección visual y la prueba de funcionamiento
descritas en el apartado 3 o si existen otras dudas respecto a la
seguridad. La vida útil depende de la frecuencia de uso, así como de
las condiciones del entorno. Las correderas se podrán usar sin límite
de tiempo siempre que se haya realizado la inspección visual y la
prueba de funcionamiento (3.) y no exista ningún criterio de exclusión.
Sin embargo, el amortiguador de cinta sufre envejecimiento y debe
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