5.
Siga visualmente todo el sistema de refrigerante y busque
señales de fuga de lubricante de aire acondicionado, daños y
corrosión en todas las líneas, mangueras y componentes. Cada
área objetable debe revisarse cuidadosamente con la sonda del
detector así como todos los conectores, acoples de manguera a
línea, controles de refrigerante, orificios de servicio con tapas en
su sitio, áreas bronceadas o soldadas y áreas alrededor de
puntos de conexión y sujeción de líneas y componentes.
6.
Siempre siga el sistema de refrigerante en una ruta continua
para no pasar por alto áreas de fugas potenciales. Si se
encuentra una fuga, siempre continúe probando el resto del
sistema.
7.
En cada área revisada, la sonda se moverá alrededor del punto,
a razón de no más de 1 a 2 pulgadas/segundo (25 a 50
mm/segundo) y no más de 1/4 de pulgada (5 mm) desde la
superficie completamente alrededor de la posición. El
movimiento más lento y cercano de la sonda mejora
notablemente la probabilidad de hallar una fuga.
8.
Se verificará una fuga aparente por lo menos una vez soplando
aire del taller en el área de la fuga sospechada, si es necesario,
y repitiendo la revisión del área. En casos de fugas muy
grandes, soplar el área con aire del taller a menudo ayuda a
localizar la posición exacta de la fuga.
13