DE VIAJE
- La primera norma para una conduc-
ción segura es la prudencia.
- Ser prudente significa también estar
en condiciones de prevenir un compor-
tamiento equivocado o imprudente de
los demás conductores.
- Aténgase rigurosamente a las nor-
mas de circulación de cada País, y so-
bre todo, respete los límites de veloci-
dad.
- Asegúrese siempre de que, además
de Usted, todos los pasajeros se hayan
abrochado el cinturón de seguridad y
de que los niños viajen en las sillitas
especiales para ellos.
Conducir en estado de
embriaguez, bajo el efecto de
estupefacientes o de ciertos
medicamentos es muy peligroso para
Usted y para los otros
Abróchese siempre el cin-
turón, tanto Usted como el
pasajero. Viajar sin los cintu-
rones de seguridad aumenta el riesgo
de lesiones graves o de muerte en
caso de accidente.
- Los viajes largos debe comenzarlos
en buenas condiciones físicas.
B-6
- No conduzca demasiadas horas
seguidas, deténgase de vez en cuando
para estirar las piernas y descansar.
- Haga circular el aire en el habitácu-
lo para que se renueve.
- No baje nunca las pendientes con
el motor apagado: en estas condiciones
no cuenta con la ayuda del freno del
motor, del servofreno ni tampoco de la
servodirección; por lo tanto, deberá su-
jetar el volante y pisar el pedal del freno
con más fuerza.
CONDUCIR DE NOCHE
Estas son las indicaciones más impor-
tantes que debe seguir cuando viaja de
noche.
- Conduzca con mayor prudencia:
la conducción nocturna requiere más
atención.
- Reduzca la velocidad, sobre todo
en carreteras sin alumbrado.
- Ante los primeros síntomas de som-
nolencia, deténgase: continuar supon-
dría un riesgo para Usted y para los
demás. Siga conduciendo sólo después
de haber descansado el tiempo necesa-
rio.
- Mantenga una distancia de segu-
ridad, respecto a los vehículos que le
preceden, mucho mayor que durante el
día: es difícil calcular la velocidad de
los otros vehículos cuando únicamente
se ven las luces.
- Asegúrese de que los proyectores es-
tén orientados correctamente: si están
demasiado bajos, reducen la visibilidad
y cansan la vista. Si están demasiado al-
tos, pueden molestar a los conductores
de los otros vehículos.
- Use las luces altas sólo fuera de la
ciudad y cuando esté seguro de no mo-
lestar a los otros conductores.
- Al cruzarse con otro vehículo, quite
las luces altas (si están encendidas) y
ponga las bajas.
- Mantenga limpios los proyectores.
- Fuera de la ciudad, tenga cuidado
con los animales que cruzan la carre-
tera.
fig. 4