Advertencias
Los audífonos están diseñados para amplificar
y transmitir sonido a los oídos, y de esta forma
compensar la pérdida auditiva. Los audífonos
(especialmente programados para cada tipo de
pérdida auditiva) sólo deben ser usados por la
persona para la que están diseñados. No debe
usarlos nadie más, ya que podrían lesionar la
audición.
Utilice los audífonos únicamente conforme a
las indicaciones de su médico o profesional de
salud auditiva.
Los audífonos no restauran la audición normal
ni mejoran o previenen un daño auditivo
generado por condiciones orgánicas.
No use los audífonos en áreas con riesgo de
explosión.
Es poco probable que usted tenga una
reacción alérgica a los audífonos. Sin embargo,
si experimenta algún tipo de comezón,
coloración, dolor, inflamación o ardor en
los oídos o alrededor de ellos, informe a su
profesional de salud auditiva y comuníquese
con su médico.
4
En el caso poco probable de que alguna de
las partes se quede dentro del canal auditivo
después de retirar el audífono, comuníquese
inmediatamente con un médico.
Lo que sigue solo aplica a personas con
dispositivos médicos implantables activos
(por ej., marcapasos, desfibriladores, etc.):
- Mantenga el audífono inalámbrico a 15 cm
(6 pulgadas), como mínimo, del implante activo.
- Si percibe interferencia, no use los audífonos
inalámbricos y póngase en contacto con el
fabricante del implante activo. Tenga en cuenta
que la interferencia también puede deberse
a cables eléctricos, descarga electrostática,
detectores de metales de aeropuertos, etc.
Algunos de los exámenes médicos o dentales
específicos con radiación que se describen
a continuación pueden afectar de manera
negativa el funcionamiento correcto de los
audífonos. Retírelos y consérvelos fuera del
área o de la sala donde se practicará:
- Exámenes médicos o dentales con rayos x
(esto incluye tomografía computarizada).
- Exámenes médicos con resonancia magnética
o resonancia magnética nuclear, los cuales
generan campos magnéticos.
5