Para la sustitución se recomienda
utilizar un recambio original, diseñado
especialmente para este vehículo.
LUBRICACIÓN DE LAS
PARTES MÓVILES DE LA
CARROCERÍA
Asegurarse de que las cerraduras y los
puntos de articulación de la carrocería,
incluidos elementos como las guías
de los asientos, las bisagras de las
puertas (y los rodillos
correspondientes), el portón del
maletero y el capó del motor,
se lubriquen periódicamente con grasa
a base de litio para asegurar su
funcionamiento correcto y silencioso, y
para protegerlos contra oxidación y
desgaste.
Limpiar cuidadosamente las partes
para eliminar cualquier resto de polvo y
suciedad. Después de la lubricación,
eliminar el aceite o la grasa en exceso.
Prestar especial atención también a
los dispositivos de cierre del capó del
motor, para garantizar su
funcionamiento correcto. Al realizar
operaciones en el capó,
exclusivamente con motor frío, recordar
que deben comprobarse, limpiarse y
lubricarse los dispositivos de cierre,
desenganche y de seguridad
correspondientes.
Lubricar los bombines de las
cerraduras externas dos veces al año.
Aplicar una pequeña cantidad de
lubricante de alta calidad directamente
en el bombín de la cerradura.
Si es necesario, acudir a la Red de
Asistencia Fiat.
CRISTALES
Si la función de descongelación está
activa, prestar atención a la
temperatura del cristal durante la
limpieza de la luneta térmica y del
parabrisas calefactados y tener
cuidado en caso de que los niños
entren en contacto con la superficie
calefactada. El cristal podría estar
caliente.
No utilizar un detergente abrasivo para
limpiar la superficie de los cristales.
No utilizar rasquetas o herramientas
puntiagudas que podrían rayar los
cristales.
Para limpiar el espejo retrovisor,
pulverizar el producto detergente en el
paño que se desea utilizar para la
limpieza. No pulverizar el detergente
directamente en el cristal.
Las etiquetas en el cristal, si están
presentes, podrían despegarse al
limpiarlo con agua caliente.
LIMPIAPARABRISAS/
LIMPIALUNETA
Limpiar periódicamente el cristal del
parabrisas y de la luneta térmica y
el perfil en goma de las escobillas del
limpiaparabrisas/limpialuneta utilizando
una esponja o un paño suave y un
detergente no abrasivo. De este modo
se eliminan la sal o las impurezas que
se han acumulado durante la marcha.
El uso prolongado de los
limpiaparabrisas/limpialuneta con el
cristal seco puede provocar el deterioro
de las escobillas, además de la
abrasión de la superficie del cristal.
Para eliminar las impurezas presentes
en el cristal seco, utilizar siempre los
lavaparabrisas/lavaluneta.
En caso de temperaturas exteriores
severas (por debajo de 0°C), antes de
accionar el limpiaparabrisas/
limpialuneta, comprobar que la parte de
goma en contacto con el cristal pueda
moverse. Si es necesario,
desbloquearla con un producto
anticongelante adecuado.
Evitar utilizar el limpiaparabrisas/
limpialuneta para quitar escarcha o
hielo.
Además, evitar el contacto del perfil de
goma de las escobillas con derivados
del petróleo como aceite motor,
gasolina, etc.
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