Cuidado de su vehículo
Enjuague el vehículo con abundante agua y séquelo
3.
con un paño limpio y suave.
Una vez que el vehículo se seque, lubrique las piezas
4.
móviles.
Asegúrese de que no se derrame lubricante
u
sobre los frenos ni los neumáticos. Si los discos,
las pastillas, el tambor o las zapatas de freno se
contaminan con aceite, sufren una enorme
reducción de su capacidad de frenado y pueden
provocar un accidente.
Lubrique la cadena de transmisión inmediatamente
5.
después de lavar y secar el vehículo.
Aplique una capa de cera para evitar la corrosión.
6.
Evite los productos que contengan detergentes
u
agresivos o disolventes químicos. Estos
productos pueden dañar las piezas metálicas, así
como la pintura y los plásticos de su vehículo.
Evite que la cera entre en contacto con los
neumáticos y los frenos.
Si el vehículo tiene piezas con pintura mate, no
u
aplique cera a estas superficies.
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#
Precauciones durante el lavado
Siga estas indicaciones durante el lavado:
No utilice máquinas de lavado a alta presión:
●
Los limpiadores de agua a alta presión pueden
u
dañar las piezas móviles y las eléctricas,
haciéndolas inservibles.
Si hay agua en la admisión de aire, podría
u
introducirse en el cuerpo del acelerador o entrar
en el filtro de aire.
No dirija el chorro de agua directamente al
●
silenciador:
La presencia de agua en el silenciador puede
u
impedir el arranque y provocar la oxidación del
propio silenciador.
Seque los frenos:
●
El agua afecta negativamente a la efectividad de
u
frenado. Tras el lavado, accione los frenos
intermitentemente a baja velocidad para ayudar
a secarlos.
No dirija el chorro de agua hacia la caja de
●
herramientas:
El agua en la caja de herramientas puede dañar
u
los documentos y otras pertenencias.
No dirija el chorro de agua hacia el filtro de aire:
●
La presencia de agua en el filtro de aire puede
u
impedir que arranque el motor.
