Antes de proceder con la instalación, verifique que la
tensión de red coincida con el valor admitido por el
proyector, es decir, 220-230 V AC 50 Hz.
El proyector se instala tanto en una superficie plana
como en el techo: en este último caso, es necesario
recurrir a estribos y/o soportes, cuya instalación debe
ser realizada estrictamente por personal especializado
de manera correcta: una instalación aproximada,
imprecisa o mal realizada puede provocar la caída y el
consiguiente daño al aparato, con la posibilidad de
lesiones y traumas, incluso graves, a personas o
animales.
En caso de instalación en una superficie plana,
compruebe
inmediaciones que hagan que el uso sea incómodo o
inseguro.
En caso de inactividad prolongada, desconecte el
proyector de la red eléctrica y retire las pilas del mando
a distancia.
El proyector no es un juguete y puede ser peligroso para
los niños incluso cuando ya se deja de usar, ya que
algunas partes podrían ser objeto de ingestión si se
desmontan o causar lesiones.
Evite colocar y utilizar el proyector en lugares
excesivamente
excesivamente polvorientos o húmedos, en presencia
de atmósferas saturadas de sustancias, gas o humo y
bajo la radiación solar directa, incluso con cristales
interpuestos.
Durante el funcionamiento, el proyector emite una luz
muy intensa desde la lente óptica colocada en la
que
no
calientes,
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haya
obstáculos
excesivamente
en
las
fríos,