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La sobrecarga de las barandillas laterales (al sentarse, apoyarse o hacer presión sobre
ellas) puede tener graves consecuencias y ocasionar riesgos. Por lo tanto, es imprescin-
dible evitar dichas sobrecargas.
Al utilizar las protecciones laterales, es necesario comprobar que son adecuadas con
respecto a las particularidades de cada paciente. Deben tenerse en cuenta especial-
mente las distancias entre los largueros y los elementos de unión en relación con la
complexión física del paciente a fin de evitar que éste quede atrapado o se deslice a
través de las aberturas. Dado el caso, deberán colocarse acolchados laterales adicio-
nales para reducir la separación o cerrar los huecos. Estas decisiones constituyen una
responsabilidad exclusiva de la supervisión médica. Resultan orientativas las especi-
ficaciones de este manual sobre la limitación de los usos previstos, así como las
instrucciones especiales relativas a la cama y a las barandillas laterales.
Deben utilizarse protecciones laterales adecuadas para el tipo de cama en cuestión.
De lo contrario, aumenta el riesgo de que se produzcan accidentes.
Antes de cada uso, es necesario controlar las barandillas/protecciones laterales para
comprobar la ausencia de daños, la fijación segura a la cama y el perfecto funciona-
miento de los mecanismos de bloqueo. Las instrucciones de uso de los respectivos
productos ofrecen especificaciones orientadas a un manejo correcto de las protec-
ciones laterales.
El uso del accionamiento manual a distancia por parte del propio paciente se
encuentra bajo la exclusiva responsabilidad de la supervisión médica y del personal
asistencial. Para asegurar un cambio de turnos ordenado y garantizar el seguimiento
del proceso, las medidas adoptadas deben constar en el respectivo informe o en la
documentación referida al tratamiento.
Si no está permitido el uso del accionamiento manual a distancia por parte del
paciente, deberá colocarse en un lugar seguro sin riesgo de quedar encajado y fuera de
su alcance (por ejemplo, en el pie de la cama).
Para proteger el accionamiento manual a distancia, es necesario evitar las caídas, la
sobrecarga de peso y la penetración de líquidos. La limpieza debe realizarse con los
paños que se utilizan para el teclado del ordenador. En caso de fallos mecánicos o
daños producidos por la humedad, el dispositivo debe reemplazarse de inmediato.
También es necesario realizar un control periódico frecuente de los cables para
comprobar que no existan daños.
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