la onda ultrasónica. Si no se puede evitar el uso de agua corriente, elimine las burbujas de gas de la
superficie de la piel con frecuencia y limpie la parte de emisión del cabezal al final del tratamiento.
En el tratamiento de agua sin gas, la atenuación de la energía del ultrasonido es mayor que en la
terapia a contacto directo, por lo que se requieren dosis más altas. Cuando se utiliza agua sin gas,
la dosis debe ser la misma que la usada en la terapia por contacto.
Intensidad recomendada
La unidad parte de una potencia preestablecida de 0.0 W/cm 2 y permite alcanzar una potencia
máxima diferente entre cada protocolo. La intensidad indicada en este manual es la que
recomendamos para esta línea nosotros y la mayoría de los protocolos más conocidos. Dependiendo
del tipo de paciente que tiene que tratar, el fisioterapeuta es libre de utilizar la potencia máxima
recomendada o de variar este valor a su discreción.
Rev. n° 03 del 08.03.2021
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