•
Seleccione una actividad de entrenamiento que le
resulte agradable. Varíe los ejercicios para hacer el
entrenamiento más interesante.
•
Empiece lentamente.
•
Haga ejercicio regularmente. Veinte a treinta
minutos cada día, tres a cuatro veces por semana
para mejorar el sistema cardiovascular.
•
Incremente gradualmente la zona de entrenamiento
a medida que mejora la forma física.
•
Antes y después de entrenar, permanezca siempre
al menos cinco minutos dentro de su zona de
ejercicio para precalentamiento y relajamiento de
los músculos.
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La zona de mantenimiento de salud tiene la
intensidad de entrenamiento más baja. Es buena
para los principiantes y para aquellas personas que
quieren fortalecer el sistema cardiovascular.
•
La zona de ejercicio aeróbico aumenta la fortaleza
y la resistencia. Actúa dentro de la capacidad de
consumo de oxígeno del cuerpo, quema más
calorías y puede durar más.
•
La zona de ejercicio anaeróbico genera velocidad
y potencia. Actúa en o por encima de la capacidad
de consumo de oxígeno del cuerpo, refuerza la
musculatura y no puede mantenerse durante
mucho tiempo.
•
Tómese el pulso después de entrenar. A
continuación, repita el procedimiento otra vez
después de tres minutos. Si el pulso no regresa
a su pulso normal de reposo, es posible que haya
entrenado con demasiada intensidad.
•
Consulte siempre al médico antes de iniciar un
programa vigoroso de entrenamiento.
EL RELOJ RECEPTOR
Puede llevarse en la muñeca o amarrarse a la bicicleta
o aparato de ejercicio.
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