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¿Quien no debería utilizar el sistema lumea de philips?
El sistema Lumea de Philips no está diseñado para todo el mundo. Si su
caso es uno de los siguientes, este aparato no es adecuado para usted.
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Si el color natural del vello en las zonas de tratamiento es rubio claro,
blanco, gris o pelirrojo.
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Si su piel es del tipo VI (si nunca o casi nunca se quema por el sol
y se broncea mucho). En este caso tiene muchas posibilidades de
desarrollar reacciones cutáneas como piel muy roja, quemaduras o
decoloraciones cuando utilice el sistema Lumea de Philips.
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Existen medicaciones y condiciones físicas que pueden provocar
reacciones adversas al utilizar el sistema Lumea de Philips. Lea el
apartado "Contraindicaciones" para determinar si cualquiera de estos
casos se puede aplicar a usted.
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Todos los tipos de bronceado pueden influir en la seguridad del
tratamiento. Esto se aplica a la exposición natural a la luz del sol y
a los métodos de bronceado artificial, como lociones y aparatos
autobronceadores, etc. Si está bronceada o planea estarlo, consulte el
apartado "Consejos de bronceado" del capítulo "Preparación para su
uso".
Contraindicaciones
La piel podría enrojecerse ligeramente e irritarse tras usar el aparato.
Esta reacción es absolutamente normal y desaparece rápidamente. Si la
irritación no desaparece después de tres días, se aconseja consultar con un
médico.
No use nunca el aparato:
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Si tiene un tipo de piel o de vello inadecuado (consulte la tabla de
tonos de piel y vello para determinar si este aparato es adecuado para
usted).
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Si padece alguna enfermedad cutánea, como cáncer de piel, si tiene
antecedentes de cáncer de piel o cualquier otro tipo de cáncer
localizado en las zonas que se van a tratar.
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Si tiene lesiones precancerígenas o numerosos lunares atípicos en las
zonas que se van a tratar.
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Si tiene antecedentes de desorden del colágeno, y es propenso a la
formación de queloides o sufre de mala cicatrización.
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Si tiene antecedentes de desorden vascular, como presencia de venas
varicosas o ectasia vascular en las zonas que se van a tratar.
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Si su piel es sensible a la luz y aparece con facilidad una reacción
alérgica o erupción.
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Si tiene infecciones, eccemas, quemaduras, folículos inflamados, heridas
abiertas, abrasiones, herpes simplex, heridas o lesiones y hematomas en
las zonas que se van a tratar.
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Si le han operado en alguna de las zonas que se van a tratar.
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Si padece de epilepsia con sensibilidad a la luz parpadeante.
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Si padece de diabetes, lupus eritematoso, porfiria o una enfermedad
cardiaca congestiva.
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Si sufre algún desorden sanguíneo.
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Si tiene antecedentes de enfermedad inmunodepresiva (incluida la
infección por VIH o SIDA).
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En zonas de la piel que se estén tratando o se hayan tratado
recientemente con ácidos alfa-hidróxidos (AHA), ácidos beta-
hidróxidos (BHA), isotretinoína tópica y ácido azelaico.
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