El cochecito solo debe usarse en terreno firme y nivelado.
Utilice su cochecito según lo previsto por el fabricante. Por ejemplo, no conduzca
hacia obstáculos (incluidos escalones, bordillos) sin frenar.
Para salvar obstáculos como escalones y bordillos, incline el cochecito sobre
las ruedas traseras (empújelo hacia atrás para subir; para descender, bájelo
lentamente hacia adelante).
No suba ni baje escaleras sin la ayuda de otra persona. Si hay dispositivos
disponibles, como rampas o ascensores, utilícelos. Si no están disponibles, dos
personas deben llevar el buggy sobre el obstáculo.
Preste especial atención cuando se encuentre en cuestas y pendientes para evitar:
- que el niño se caiga del cochecito
- el cochecito se vuelque
- el cochecito se aleje rodando
Levante la silla de paseo únicamente por las piezas que estén sólidamente unidas:
- Tubo del chasis delantero por encima de las ruedas delanteras
- Eje frontal
- Barra de empuje
Si tiene que estacionar en una pendiente, coloque el cochecito cuesta arriba con los
frenos activados y asegúrese de que el asiento esté en posición vertical.
Existe el riesgo de que la silla de paseo se vuelque hacia atrás si el asiento está
en posición reclinada.
Antes de abandonar la silla de paseo y antes de subir y bajar de ella, active
siempre los bloqueos de las ruedas.
Cuando su hijo alcance objetos al frente, al costado o detrás del cochecito, asegúrese
de que no se incline demasiado hacia afuera de la silla de paseo, ya que el cambio en
el centro de gravedad podría hacer que el cochecito se incline o vuelque.
El manejo del cochecito está fuertemente influenciado por la presión de los neumáticos.
Inflar correctamente los neumáticos mejora considerablemente su maniobrabilidad.
La presión del aire debe ser de al menos 2 bar (200 kPa o 29 PSI).
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