• Existen cuatro boquillas para chorro redondo (R):
• calibre & estándar
• calibre 6, 12, 20 opcionalmente.
• Cada boquilla de pulverización está equipada con un sombrero de pulverización que se mantiene
en su posición mediante una tuerca. En la parte trasera de la boquilla y en el cuerpo del
pulverizador hay un orificio desmontable, disponible en diferentes diámetros en función del tipo de
alimentación de pintura y del caudal de pintura utilizado.
• El enlace entre la llegada de la alta tensión y el electrodo (o el inyector metálico) se logra gracias
a una serie de resortes de contacto y de resistencias eléctricas de amortización que reducen el
riesgo de arco eléctrico entre el cabezal de pulverización y la pieza a pintar.
• Las juntas tóricas situadas en el cuerpo del pulverizador garantizan las estanqueidades del aire.
• Tres juntas labiales situadas en el cuerpo de la pistola garantizan la estanqueidad entre la pintura
y el aire de pulverización.
2.2. Principio de funcionamiento
2.2.1. Pulverizador
En reposo: una vez que se han determinado las presiones de pintura y del aire de pulverización, y
siendo nula la presión del aire de pilotaje de la aguja, los tres resortes fuerzan las tres válvulas a
permanecer cerradas: no hay proyección de pintura ni corriente del aire de pulverización.
Al iniciarse la pulverización: se establece la presión de aire del pilotaje de la aguja. El cilindro neumático
retrocede el pistón de la válvula de aire central (o del aire direccional) el cual retrocede a su vez el pistón
de la válvula de aire de los extremos ( o del aire remolineante) el cual retrocede a su vez la aguja de
pintura: las tres válvulas se abren y se produce entonces la proyección de pintura y la corriente de los
aires de pulverización según el orden descrito.
Al pararse la pulverización: las tres válvulas se cierran en sentido contrario al del inicio de la
pulverización.
La electrostática: para pintar mediante electrostática un objeto conductor de electricidad (metálico o de
madera) conectado al mismo potencial que la tierra, las gotitas de pintura deben estar cargadas
eléctricamente. Luego son transportadas por la corriente de aire y por el campo eléctrico cuyas líneas
de fuerza se orientan hacia el objeto a pintar. La carga de la pintura se efectúa por el inyector de pintura
del cabezal de pulverización al cual se le aplica la alta tensión Para el chorro plano, este inyector es
generalmente metálico, puede ser de plástico y estar equipado con un electrodo para garantizar una
máxima seguridad ( y por ende, un mínimo riesgo de incendio). Para el chorro plano, el inyector plástico
está equipado con un electrodo puntiagudo ionizante. El cabezal de pulverización (inyector de pintura)
está conectado eléctricamente a un generador de alta tensón mediante un cable adecuado.
Las ventajas de la aplicación de pinturas electrostáticas son:
• un mayor rendimiento de la aplicación (relación entre el peso de pintura efectivamente aplicado
sobre la pieza a pintar y el peso de pintura necesario para pintar la pieza): es por lo menos del
doble comparado con el obtenido mediante una aplicación sin electroestática. Si se usa chorro
redondo, dicho rendimiento puede alcanzar un 90% Esto significa que la aplicación electroestática
permite reducir las cantidades de pintura necesarias para una producción determinada. También
permite disminuir los residuos (de solventes en la atmósfera, de lodos,) y participar en el esfuerzo
por proteger nuestro medioambiente.
• una disminución de la suciedad en la cabina de pintura. Ello resulta del aumento del rendimiento
de la aplicación: la pieza a pintar atrae casi toda la niebla de pintura provocada por el cabezal de
pulverización. Por consiguiente, se reduce el mantenimiento de las cabinas de pintura.
• un contorneo electroestático muy importante. Es el aspecto más espectacular de la aplicación
electroestática: toda la superficie del objeto a pintar atrae la niebla de gotitas electrizadas. Por
consiguiente, cuando se pinta el anverso de una pieza se va pintando asimismo una parte del
reverso de la misma. Por ende, sólo se necesitará una leve aplicación sobre el reverso para
terminar de pintar toda la pieza. Este fenómeno es muy eficaz cuando se usa el chorro redondo
para pintar piezas tubulares (hasta un diámetro de 200 mm) o piezas enrejadas. Esto permite no
sólo reducir los consumos de pintura sino también reducir el tiempo necesario y el número de
pulverizadores requeridos para pintar una pieza.
Indice de revisión : C
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7005