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anchura máxima 14,4 cm
grosor 2,8 cm.
Al contrario de las demás bobinas del sistema, por su capacidad de
adaptación morfológica, la bobina TMJ no está provista de mecanismo
mecánico para su conexión física a la mesa.
Para fijar la bobina al paciente y permitir el posicionamiento estable del
área que interesa en el centro del campo visual, la bobina está provista de
una correa de 86,5 cm de largo.
La correa se sujeta a la bobina por medio de velcro: esta solución permite
un acoplamiento entre bobina y correa en función de la talla del paciente,
puesto que el alojamiento del velcro en la bobina es de mayor tamaño
respecto a la correa. Para pacientes de talla pequeña, la correa se sujeta
en el alojamiento en el lado de apertura de la bobina; para pacientes de
talla grande la correa se sujeta en el alojamiento en el lado del conector.
Para pacientes de talla normal, la correa se sujeta en posición intermedia.
Para aumentar el confort del paciente durante el examen, la correa está
provista de suave acolchado. Este acolchado debe colocarse entre la
bobina y el mecanismo de apertura/cierre para el examen de la
articulación temporomandibular izquierda y en el lado contrario para el
examen de la ATM derecha.
La bobina está equipada con una almohadilla especial desmontable, en
forma de cuña (que se muestra en la figura anterior), que permite la
máxima adherencia a la región anatómica a examinar.
La bobina incluye un cable de conexión al conector en la parte superior del
imán que garantiza la conexión eléctrica y el reconocimiento automático
del modelo de bobina.
Es fundamental tener en cuenta la existencia de planos de isosensibilidad
paralelos al plano de la bobina: en efecto, la señal de RM disminuye a lo
largo del eje perpendicular a estos planos.
Es posible obtener una buena calidad de la imagen desde el área
superficial posicionada en el orificio de la bobina hasta cierta distancia (en
el eje perpendicular al plano de la bobina en dirección al cuerpo del
paciente) que resulta muy difícil de determinar para todos los pacientes.
En todo caso, se puede decir que en caso de pacientes normales el valor
de esta distancia es de 4 cm.
Examinando la secuencia Scout, es necesario comprobar que la
región anatómica y/o la patología a analizar se encuentre a una
distancia al menos de 5 cm del área superficial colocada en el orificio
de la bobina para poder realizar el examen y obtener una buena
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A t e n c i ó n
calidad de imagen.
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