I-Tech MIO-SONIC Manual De Uso página 10

Ocultar thumbs Ver también para MIO-SONIC:
Tabla de contenido
Luego están también los efectos no térmicos ligados a la propagación de
ondas ultrasónicas: los efectos mecánicos se deben a la fuerza que ejercen las
ondas sonoras sobre las células que sufren así micro desplazamientos hacia
zonas de menor presión, sufriendo fenómenos de torsión y rotación, con la
consiguiente formación de pequeños remolinos en los fluidos intersticiales
(flujo). Estas variaciones de presión generan efectos bioquímicos y
biológicos, que se manifiestan como posibles alteraciones en la
permeabilidad de las membranas celulares y, en el caso de las células grasas,
como la liberación de moléculas complejas como las grasas que contienen,
que luego son liberadas al sistema circulatorio y en gran parte eliminados a
través del sistema linfático y la microcirculación. Por último, muy relacionado
con el efecto bioquímico está la fonoforesis, que consiste en la capacidad de
los ultrasonidos para introducir un fármaco en los tejidos.
Otro fenómeno no térmico es el de la cavitación. La cavitación es un
fenómeno físico que consiste en la formación de zonas de vapor dentro de un
fluido. Los gases disueltos en el interior del fluido se agregan debido a la
bajada de presión producida por los ultrasonidos, formando burbujas o
cavidades que contienen vapor y posteriormente implosionan por el
movimiento en zonas de mayor presión. La energía así liberada produce
reacciones en las áreas circundantes.
En el campo terapéutico, los ultrasonidos se obtienen de forma artificial
aprovechando la propiedad de algunos cristales minerales de expandirse y
comprimirse cuando se someten a la acción de un campo eléctrico. La
irradiación ultrasónica genera por tanto vibraciones y un consiguiente micro
masaje de considerable intensidad, que actúa en profundidad en los tejidos.
Por tanto, el calor es generado por este micro masaje, que consiste en la
colisión y fricción de las estructuras celulares e intracelulares afectadas por el
haz de ondas ultrasónicas.
La
terapia
por
ultrasonidos
es
particularmente adecuada para todas
las
patologías
del
sistema
musculoesquelético en las que se desea
un efecto analgésico, es decir, en la
ciática y neuritis en general, en
calcificaciones
periarticulares,
enfermedad de Duplay, enfermedad de
Dupuytren, hematomas organizados y
tejidos
cicatriciales,
tendinitis
y
contracturas musculares.
Los ultrasonidos también se pueden
utilizar de forma eficaz en el tratamiento de las imperfecciones provocadas
por la celulitis, reactivando la circulación local y reduciendo el efecto "piel de
IACER Srl
8
MNPG72-04
Tabla de contenido
loading

Tabla de contenido