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menor ángulo de ataque, consecuencia de desinflar las puntas del ala, puede conducir a una
gran plegada. Mete siempre primero las orejas y luego pisa el acelerador. Aunque sea posible
hacer una barrena o espiral mientras se tienen orejas metidas, las elevadas fuerzas a las
que se sometería a los cordinos inferiores podrían exceder su carga de rotura, con las serias
consecuencias que eso acarrearía.
Ozone recomienda encarecidamente NO hacer barrenas con las orejas metidas.
Bandas B
La maniobra de bandas B se emplea para descensos rápidos y únicamente en situaciones de
emergencia. Es más eficiente perder altitud con una barrena que haciendo bandas B.
Para iniciar unas bandas B, mantén en las manos los frenos y agarra los maillones de las
bandas B. Dirige tu vista hacia la vela y tira suave y simétricamente de las bandas B hacia
abajo. En cuanto se rompa la circulación del aire sobre la vela, lo notarás, y verás cómo
se deforma en el sentido de la cuerda y se mueve hacia atrás. Una vez que la vela se haya
estabilizado sobre tu cabeza, mantén las bandas B en es misma posición para descender en
un parachutaje controlado. No bajes más las bandas de ese punto. Si las bajas demasiado,
la vela puede deformarse en su envergadura y las puntas irse hacia adelante, y en aire
turbulento tirar demasiado puede dar como resultado que la vela forme una especie de
herradura o croissant, en configuración de parachutaje inestable, con la vela zarandeándose.
Si ocurre eso, sube lentamente las bandas B hasta que la vela se estabilice, o simplemente
sal de la maniobra de bandas B soltando de inmediato dichas bandas. No trates de mantener
unas bandas B si no has logrado hacer un parachutaje estable.
Para salir de la maniobra, sube de manera simétrica y progresiva las bandas B en gesto
continuo y suave. La vela reanudará su vuelo normal, es decir, avanzando, y sin que haya
que hacer nada más. Antes de volver a usar los frenos, cerciórate bien de que la vela vuelve
a tener velocidad de avance.
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