Sección 13: Información de salud y seguridad
En esta sección se describen las precauciones de seguridad
asociadas con el uso del teléfono. Los términos "dispositivo móvil" o
"teléfono móvil" se utilizan en esta sección para referirse al
teléfono. Lea esta información antes de usar su dispositivo móvil.
Exposición a señales de radiofrecuencia
La Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos
(FDA, por sus siglas en inglés) ha publicado información para los
consumidores en relación a la exposición a radiofrecuencia de los
teléfonos móviles. La publicación de la FDA incluye la siguiente
información:
¿Representan un peligro para la salud los teléfonos
móviles?
A muchas personas les preocupa que la radiación de los teléfonos
móviles causará cáncer u otros peligros serios para la salud. El peso
de la evidencia científica no ha vinculado el uso de teléfonos
móviles con ningún problema de la salud.
Los teléfonos móviles emiten bajos niveles de energía de
radiofrecuencia. En el transcurso de los últimos 15 años, los
científicos han llevado a cabo cientos de estudios para analizar los
efectos biológicos de la energía de radiofrecuencia emitida por los
teléfonos móviles. Si bien algunos investigadores han informado
sobre cambios biológicos asociados con la energía de
radiofrecuencia, no ha sido posible replicar esos estudios. La
mayoría de los estudios publicados no han demostrado una
215
asociación entre la exposición a la radiofrecuencia de un teléfono
móvil y problemas de salud.
Los bajos niveles de radiofrecuencia que emiten los teléfonos
móviles mientras se usan caen en el rango de las frecuencias de
microondas. Por otra parte, emiten radiofrecuencia a intervalos de
tiempo considerablemente reducidos cuando están en el modo de
espera. Mientras que altos niveles de radiofrecuencia pueden
afectar la salud (calientan el tejido), exponerse a bajos niveles de
radiofrecuencia que no producen calor no causa ningún efecto
adverso a la salud.
Los efectos biológicos de la energía de radiofrecuencia no deben
confundirse con los efectos de otros tipos de energía
electromagnética.
Los niveles extremadamente altos de energía electromagnética,
como los encontrados en rayos X y rayos gamma, pueden ionizar los
tejidos biológicos. La ionización es un proceso en el que los
electrones se eliminan de sus ubicaciones normales en los átomos y
moléculas. Puede dañar permanentemente los tejidos biológicos,
incluido el ADN, que es el material genético.
Los niveles de energía asociados con la energía de radiofrecuencia,
incluyendo las ondas de radio y las microondas, no son lo
suficientemente altos como para causar la ionización de átomos y
moléculas. Por lo tanto, la energía de radiofrecuencia es un tipo de
radiación no ionizante. Otros tipos de radiación no ionizante incluyen