- No empiece nunca una sesión de estimulación con el usuario de pie. Los primeros cinco minutos
de la estimulación siempre deben aplicarse con el usuario en posición sentada o tumbado. En
algunos casos excepcionales, los usuarios propensos a estados de ansiedad pueden sufrir un síncope
vasovagal. Esta reacción tiene un origen psicológico y está relacionada con el miedo a la estimulación
muscular y la sorpresa que produce ver cómo los músculos se contraen de forma involuntaria. El
síncope vasovagal provoca una reducción del ritmo cardiaco y una bajada de la tensión arterial, lo
cual provoca sensación de debilidad y tendencia a perder el conocimiento. En este caso, lo único que
hay que hacer es detener la estimulación y hacer que el usuario se tumbe con las piernas en posición
elevada hasta que la sensación de debilidad desaparezca (de 5 a 10 minutos).
- No permita nunca que una contracción muscular durante una sesión de estimulación dé lugar a un
movimiento. La estimulación siempre se debe aplicar de forma isométrica, es decir, los extremos
del miembro en el que se está estimulando un músculo deben estar bien sujetos para evitar todo
movimiento resultante de la contracción.
- No desconecte ningún módulo en funcionamiento durante la sesión de estimulación. Antes que
nada tendrá que apagarlos.
- No use el estimulador mientras conduce, opera maquinarias o durante cualquier actividad en la que
las contracciones musculares involuntarias puedan poner al usuario en riesgo de sufrir lesiones. No
aplique estimulación mientras duerme.
- No utilice el estimulador a una altitud superior a 9.800 pies.
- Apague siempre el estimulador antes de mover o retirar los electrodos durante una sesión, para
evitar descargas eléctricas al paciente.
- No intente colocar los electrodos en ninguna parte del cuerpo que no esté visible directamente
sin ayuda.
- Coloque los electrodos de forma que toda su superficie esté en contacto con la piel.
- Por motivos de higiene, cada paciente debe tener de su propio juego de electrodos. No utilice los
mismos electrodos para distintos pacientes.
- Los electrodos o los geles contaminados pueden provocar infección.
- El uso de electrodos con hidrogel degradado puede provocar quemaduras en la piel.
- Tamaño de los electrodos. No utilice los electrodos en un área menor a 16 cm² ya que existe
riesgo de quemaduras asociadas. Proceda sistemáticamente con precaución cuando la densidad de
la corriente sea más de 2 mA/cm².
- No sumerja los electrodos en agua.
- No aplique ningún tipo de disolvente a los electrodos.
- Irritaciones en la piel. Algunos pacientes pueden experimentar irritación o hipersensibilidad de la
piel debido a la estimulación eléctrica o al medio conductor eléctrico. Generalmente la irritación
puede reducirse usando un medio conductor alternativo o colocando los electrodos en sitios
alternativos. Si se observa enrojecimiento en la piel bajo el electrodo, no inicie nunca otra sesión de
estimulación en la misma zona si el enrojecimiento sigue siendo visible.
inForMACiÓn iMPortAnte
¡Precaución!
29