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Para comprobar si hay fugas: Prueba de fugas a presión
Compruebe si hay fugas aplicando una solución de prueba de burbujas en todas las conexiones de las tuberías.
Descargue todo el gas nitrógeno.
Rompa el vacío presurizando con gas nitrógeno hasta una presión manométrica mínima de 0,2 MPa (2 bar).
No ajuste nunca la presión manométrica por encima de la presión máxima de funcionamiento de la unidad, es decir,
4,0 MPa (40 bar).
Nota
Utilice SIEMPRE una solución de prueba de burbujas recomendada por su mayorista.
NUNCA utilice agua jabonosa:
El agua jabonosa puede agrietar los componentes, como las tuercas abocardadas o los tapones de las válvulas de cierre.
El agua jabonosa puede contener sal, que absorbe la humedad que se congelará cuando se enfríen las tuberías.
El agua jabonosa contiene amoníaco que puede provocar la corrosión de las juntas abocardadas (entre la tuerca
abocardada de latón y la abocardada de cobre).
Tratamiento de aislamiento térmico
Las tuberías del lado del líquido y del aire tienen una temperatura baja durante la refrigeración. Adopte medidas de
aislamiento suficientes para evitar la condensación.
• Asegúrese de utilizar un material de aislamiento térmico
con una resistencia al calor de 120°C o superior para la
tubería de gas.
• El material aislante fijado para la parte de la unidad
interior donde se conecta la tubería debe someterse a un
tratamiento de aislamiento térmico que no deje huecos.
• En el caso de las tuberías exteriores, deben realizarse
tratamientos de protección adicionales, como añadir
cajas metálicas para conductos o envolver las tuberías
con materiales de papel de aluminio. Los materiales de
aislamiento térmico expuestos directamente al aire libre
se degradan y pierden sus propiedades aislantes.
Cuerpo de la
unidad
Correa de la bomba de
aislamiento térmico auxiliar
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Lado de tuberías
in situ