Frecuencia de pulso
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Ciclo de servicio (ratio ON:OFF)
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Tiempo de rampa (ascendente/descendente)
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Modo de estimulación eléctrica
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Duración y frecuencia del tratamiento
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Electrodos (tipo, tamaño y colocación)
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Formas de onda de la corriente
Las formas de onda bifásicas parecen ser las más efectivas.
Algunos investigadores han aportado pruebas que favorecen las formas de onda asimétricas sobre
las simétricas, ya que las corrientes asimétricas generaron una mayor producción de fuerza. No
obstante, la fuerza de contracción no depende únicamente de la forma de la onda estimuladora, sino
también de la amplitud, la frecuencia y la duración del pulso. Para producir una contracción de una
determinada intensidad, debe recordarse que cuanto más breve es la duración del pulso, mayor debe
ser su amplitud (esto resulta evidente en la denominada curva de fuerza-duración).
El terapeuta ha de ajustar la forma de la onda para producir una contracción satisfactoria que resulte
lo menos molesta posible. La literatura no aclara qué formas de onda son las más adecuadas, y no
debe olvidarse la preferencia del paciente a la hora de seleccionar la forma de onda de la corriente
NMES.
Amplitud (intensidad de estimulación)
En este caso, lo mejor es utilizar un criterio subjetivo más que objetivo. El método más común es
incrementar progresivamente la intensidad de estimulación (sin contribución del paciente) hasta que
se consiga una contracción significativa solo con la máquina. Una vez establecido este nivel, se invita
al paciente a «participar» en los patrones de estimulación, lo que ocurre directamente cuando se
emplea una estimulación con patrón/rampa.
El ajuste de la amplitud de la corriente es crítico en NMES debido a la correlación fisiológica entre la
amplitud de corriente y la activación espacial de las unidades motoras (UM). Cuanto mayor sea la
amplitud de corriente utilizada, mayor será el número de unidades motoras activadas así como la
fuerza de la contracción muscular provocada. Cuanto mayor es la amplitud de la corriente, más eficaz
resulta NMES para el fortalecimiento muscular tanto en individuos sanos como en pacientes.
Salida de corriente constante (CC)
Los equipos de estimulación utilizados para NMES son de tipo corriente constante (CC). Es decir, la
amplitud de corriente establecida (p. ej. 80 mA) se mantiene constante (de ahí el término corriente
constante) durante el tratamiento, con independencia de los cambios en la impedancia del tejido con
el tiempo.
La principal ventaja de los equipos de estimulación de tipo CC es que ofrecen niveles predecibles de
estimulación eléctrica, haciendo que la terapia sea más predecible y menos molesta para el paciente.
Duración del pulso
En NMES, la duración de los pulsos suele variar entre 100 y 600 s. Para producir una contracción de
una determinada intensidad, debe recordarse que cuanto más breve es la duración del pulso, mayor
debe ser su amplitud. Las pruebas recientes parecen sugerir que la duración del pulso es un factor
menos importante que la intensidad o la frecuencia, y que la configuración más eficaz en el entorno
clínico es probablemente de unos 200 s. Las contracciones musculares más fuertes se producen con
pulsos de 300-400 s, pero estos producen asimismo una estimulación importante de las fibras
sensitivas.
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