En el Dispenser podemos tener una energía disponible que será el equivalente al tamaño del
depósito de agua, de forma que cuanto mayor sea éste, mayor podrá ser la disponibilidad de
agua.
El depósito se va llenando de acuerdo con el caudal que se ha contratado. En el caso del Dis-
penser el depósito se va llenando de forma constante a un ritmo proporcional a la energía que
se ha contratado. Si ese caudal no es suficiente se puede modificar el contrato y adaptarlo a
las necesidades actuales.
El consumo de agua es equivalente al consumo de energía, cuanto mayor sea éste más rápi-
damente se vaciará el deposito. Concretamente se pueden dar tres situaciones distintas:
Consumo equilibrado, la cadencia de llenado y la de vaciado de nuestro depósito es
muy parecida, por lo tanto siempre hay un nivel de agua aceptable, que permite poder
satisfacer en todo momento las necesidades de los usuarios.
Consumo Bajo, en esta situación la cadencia de llenado es superior a la de vaciado
por lo tanto la tendencia es a llenar al máximo el depósito. Esta situación no es la óptima
ya que el objetivo del sistema de gestión no es acumular el máximo de agua ( energía),
sino buscar el equilibrio entre la carga y el consumo.
Consumo excesivo, en este caso la cadencia de llenado es muy inferior a la de vacia-
do, por lo tanto el depósito se acaba vaciando dejando de tener disponibilidad de agua
(energía), lo que nos lleva a una situación crítica.
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Figura 4: Gestión del llenado/vaciado del depósito de agua�
Sistema Dispenser Universal
Manual de Instrucciones