Una vez terminada la jornada o finalizado el trabajo es necesario realizar una
buena limpieza. Puede variar esta atención si los materiales que se han empleado son de
dos componentes de catalización rápida o monocomponentes de secado al horno. Son
los dos extremos. En el primer caso la limpieza debe ser con disolvente de limpieza que
rompa la mezcla. Todos los conductos de la máquina, manguera y pistola, deben quedar
con disolvente en todos los casos.
El proceso a seguir lo detallamos a continuación.
1.-
Poner el seguro a la pistola y descompresionar el regulador de paso de aire a la
pistola.
2.-
Desmontar la boquilla de la pistola y limpiarla con diluyente limpio, soplando
posteriormente. En esta operación no se emplearán objetos punzantes (anula
garantía).
3.-
Quitar el seguro de la pistola dar marcha al equipo y siguiendo las normas de
seguridad apuntar al recipiente donde absorbe la bomba el material. Sacar la
absorción del mismo y esperar a que por la pistola ya no salga material.
Introduciendo entonces la sonda en diluyente de limpieza. Empezará a salir por la
pistola restos de material para posteriormente salir el diluyente. Cuando éste salga
limpio y siguiendo con el gatillo apretado cerrar la válvula de paso de aire al
equipo. Entonces dejará de salir el líquido a presión. Ver normas de descompresión.
Repetimos que cuando se trata de materiales de dos componentes, la limpieza se
realizará con diluyente de limpieza, es decir disolvente que rompe la mezcla.
4.-
Los conductos de la máquina, nunca deben quedar secos por lo que la sonda de
absorción ha de permanecer siempre sumergida en diluyente. Hay que comprobar
el estado de la manguera por razones de seguridad, no sometiéndola a torsiones ni
a golpes con elementos pesados. Su recambio se realizará con alguna frecuencia.
5.-
Abrimos el grifo de purga y comprobamos el filtro interior del pulmón salida de
bomba desenroscando con la mano la parte superior. Igualmente comprobamos
el filtro de la pistola, limpiándolos con diluyente limpio y con aire a presión.
En estas condiciones el equipo queda listo para su próxima utilización.
Es importante saber que una boquilla, después de 500 horas de trabajo, sobre todo con
materiales abrasivos, la apertura del abanico ya no es ni parecido a la de sus comienzos
y el grado de distribución del material, muchas veces no es correcto. El resultado es que
consume más cantidad de material del debido, y la calidad de acabado no es perfecto.
Es el momento de reponerla.
PARADA Y LIMPIEZA (Mantenimiento)
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