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2. Despegando el electrodo
Despegue un electrodo de su soporte de plástico,
sujetándolo por uno de sus dos extremos (ver figura
2). La calidad del tratamiento depende de la calidad de
los electrodos. Están diseñados para ser utilizados unas
20 veces, a condición de que la piel se haya limpiado
y desengradado a fondo antes de colocar el electrodo.
Los electrodos usados excesivamente pierden su
capacidad de transmitir impulsos eléctricos y, por lo
tanto, el tratamiento resulta ineficaz.
FIGURA 2
3. Colocación del electrodo
Use un espejo para colocar correctamente el electrodo
(ver figura 3).
FIGURA 3
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ES/US
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