músculos por cada lado del cuerpo (aproximadamente 400 en total).
Los músculos esqueléticos son el objetivo de las EMS.
Mecanismo de la contracción muscular
El músculo esquelético desempeña sus funciones a través del mecanismo
de la contracción. Cuando se da la contracción del músculo, se produce
el movimiento de las articulaciones y, en consecuencia, el movimiento
del esqueleto.
El músculo se contrae de la siguiente manera: cuando una persona
decide hacer un movimiento, se genera un cambio del potencial
eléctrico en el centro motor del cerebro y este envía una señal eléctrica
al músculo que deberá contraerse.
La señal eléctrica es transmitida como un cambio de potencial
(voltaje), un impulso eléctrico a través del nervio motor hasta el músculo
a estimular.
Tras recibir el impulso, los iones Ca se liberan causando una interacción
entre la actina y la miosina. El resultado es que la distancia entre las
líneas Z disminuye causando así la contracción del músculo.
La energía necesaria para la contracción es proporcionada por la
fuente de azúcares y grasas presentan en el cuerpo humano. En otras
palabras, la electroestimulación no es una fuente directa de energía,
sino que funciona como una herramienta que provoca la contracción
muscular.
El mismo tipo de mecanismo se activa cuando la contracción muscular
se produce por las EMS. Es decir, asumen el mismo papel de un impulso
natural transmitido por el sistema nervioso motor.
Normalmente, el final de la contracción del músculo este se relaja y
vuelve a su estado original.
Contracción isotónica e isométrica
La contracción isotónica se manifiesta cuando en un movimiento de
nuestro cuerpo los músculos afectados producen un estado de tensión
constante. Cuando, en cambio, los agentes articulares de un segmento
corporal se bloquean y la musculatura produce una tensión, esta se
llama contracción isométrica.
En el caso de la electroestimulación se prefiere normalmente una
contracción isométrica, ya que permite obtener un control más eficaz.
La distribución en el músculo de los diferentes tipos de fibras
La relación entre las dos principales categorías (tipo I y tipo II) puede variar
considerablemente. Hay grupos de músculos que están normalmente
hechos de fibras de tipo I, como el sóleo, y músculos que tiene sólo fibras
de tipo II como el músculo orbicular, pero en la mayoría de los casos
tenemos una coexistencia de diferentes tipos de fibras. Los estudios
realizados sobre la distribución de las fibras en el músculo han destacado
la estrecha relación entre la motoneurona (tónica o fásica) y las
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Rev. 03 Multi_06_2018