Gracias a este algoritmo, el detector analiza el diagrama térmico leído por el
sensor: la intensidad de la radiación infrarroja, el tamaño del punto de calor, la
velocidad de movimiento, el tiempo que permanece en el área de detección y
otros parámetros.
Por lo general, en este punto, el detector está listo para tomar una decisión:
ignorar la activación o provocar una alarma. Pero si la situación no está clara, el
detector activa el algoritmo LISA de dos fases. Cómo funciona: en cuanto
ambos sensores IR detectan movimiento, LISA realiza el análisis de correlación
y espectral de las señales, distinguiendo entre amenazas reales e interferencias.
Análisis de correlación
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Cuando se detecta movimiento, el algoritmo LISA analiza y compara las formas
de onda de dos señales de los sensores infrarrojos en tiempo real. Si las formas
de onda son similares, el detector activa la alarma.
Análisis espectral
