3B SCIENTIFIC® PHYSICS
U30010 Semiesferas de Magdeburgo
Instrucciones de uso
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Las esferas de Magdeburgo sirven para demostrar el efecto
de la presión atmosférica (experimento histórico realiza-
do por Otto von Guericke).
1. Aviso de seguridad
• No trate de separar las semiesferas evacuadas em-
pleando alguna herramienta como palanca.
• No trate de separar las semiesferas usando cuerdas,
o algún medio semejante, puesto que, en el mo-
mento de separarse, pueden dispararse como pro-
yectiles.
• Al airear las semiesferas, sosténgalas para evitar el
daño que podría producirse tras la caída de las
semiesferas.
• Es necesario que exista suficiente espacio libre por
detrás de las personas que intenten separar las
semiesferas de Magdeburgo.
2. Descripción, datos técnicos
Se trata de dos semiesferas de plástico con empuñadu-
ras y empaquetadura de goma en los bordes que se
pueden acoplar creando el vacío entre ellas. Una de las
semiesferas está provista de un grifo de cierre y de airea-
ción. El equipo se completa con una manguera corta.
Conexión de vacío:
Diámetro:
Longitud de la manguera: 110 mm
1
8 mm
120 mm
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Bomba manual de vacío
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Manguera
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Grifo de cierre y aireación con tubo flexible
4
Semiesfera
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Empuñadura
3. Principio de funcionamiento
La tierra está cubierta por una capa de aire: la atmósfera.
Tal como sucede con el resto de la materia, la fuerza de
gravedad también atrae las moléculas de aire y, por tan-
to, éstas se concentran sobre la superficie terrestre. La
presión atmosférica, ejercida por la masa de aire que
rodea la tierra, tiene su mayor valor al nivel del mar, y
disminuye si aumenta la distancia con respecto a la su-
perficie terrestre. De manera análoga al comportamien-
to de los fluidos, la presión atmosférica actúa homogé-
neamente sobre todos los lados de un cuerpo determi-
nado. En un cuerpo que posea una cavidad abierta, exis-
te siempre un equilibrio entre la presión externa e inter-
na del aire. Si la presión interna se vuelve menor a la
externa, fluirá aire hacia el interior, con lo que se restable-
cerá el equilibrio. También en el caso contrario, si la pre-
sión interna se torna mayor a la externa, se mantiene la
misma tendencia de equilibrio puesto que el aire fluirá
hacia el exterior. Si el cuerpo se encuentra cerrado, en el
primer caso, la fuerza resultante de la diferencia de pre-
sión entre el exterior y el interior actúa sobre la superficie
del cuerpo, apretándolo, y, en el segundo caso, se ejerce
una presión hacia afuera, la cual tiende a provocar la
explosión del cuerpo.
El físico y burgomaestre de Magdeburgo, Otto von
Guericke, fue el primero en demostrar la acción de la
presión atmosférica. Sus estudios sobre el vacío empeza-
ron en 1650 y llegaron a la cima con el espectacular expe-
rimento del año 1654, realizado en Regensburgo: Las
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