2. Descripción del producto.
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2.1 Información sobre el material
Todos los elementos de madera de la silla terapéutica smilla. se confec-
cionan con madera de haya y están barnizados. La liberación de formal-
dehído del barniz es inferior a las exigencias de E1. Las fundas son 100 %
poliéster difícilmente inflamable (conforme a EN 1021-1+2).
2.2 Manejo / Transporte
La silla terapéutica no está prevista para ser transportada. Si por algún
obstáculo no pudiese evitar tener que transportarla, siga las indicacio-
nes presentadas en "Levantar la silla terapéutica". Para transportar la silla
terapéutica ponga todos los elementos ajustables en la medida más pe-
queña.
Levantar la silla terapéutica
Controle que nunca se levante la silla terapéutica cuando haya una
persona sentada. Asegúrese de que todas las uniones atornilladas y los
botones giratorios estén firmemente apretados antes de levantar la silla
terapéutica. Solamente está permitido levantar la silla en los soportes de
reposapiés o placa del asiento o en el chasis.
2.3 Campos de aplicación, uso correcto
La silla terapéutica smilla. es un producto sanitario de la clase de riesgo 1 y
se emplea para compensar posiciones incorrectas o inestabilidades de la
posición sentada. Permite permanecer sentado durante largo tiempo sin
molestias y facilita una posición funcional y fisiológicamente adecuada.
2.3.1 Indicaciones
La silla terapéutica smilla. ha sido diseñada para niños y jóvenes, que
padecen trastornos con problemas al sentarse por daños funcionales y/o
estructurales del torso o de la musculatura del torso y, si procede, del cuello
(p. ej. por enfermedades neurológicas/neuromusculares, por deformación
de la columna vertebral) con posturas incorrectas. Las sillas terapéuticas
son útiles cuando no es posible permanecer sentado durante largo tiem-
po en los muebles habituales, cuando no es necesario un asiento rígi-
do y cuando se precisa mantener una posición sentada fisiológicamente
correcta y para garantizar un asiento estable cuando es necesaria una
adaptación frecuente debido a estirones del paciente en la fase de des-
arrollo correspondiente (sobre todo los niños pequeños).
2.3.2 Contraindicaciones
En principio la indicación del uso de una silla terapéutica debe ser acom-
pañada por un ortopeda. Por ello, antes del suministro deberá aclararse si
existen contraindicaciones para el paciente. Por lo general, cualquier tipo
de dolor es una contraindicación.