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h) Colocar de nuevo el espéculo intercambiable en la parte frontal del Lantitaps (Figura
5).
i)
El Lantitaps está listo para su uso.
REALIZACIÓN DE LA IRRIGACIÓN DEL OÍDO / LIMPIEZA DEL CERUMEN
a) Explicar el procedimiento de la irrigación a la persona a la que se le va a realizar la
maniobra de extracción e invitarlo a que se siente.
b) Colocar un recipiente debajo del oído a tratar para recoger el sobrante de la irrigación,
mezcla de cerumen y agua, y colocarle una toalla o bata sobre el hombro para evitar
que se manche. Proporcionarle además una toalla pequeña, o papel secante, para que
se pueda secar si lo necesita en cualquier momento.
c) Visualizar el canal auditivo de forma que pueda orientar el flujo de agua de la forma
correcta antes de utilizar el Lantitaps, aunque la visualización directa no es
imprescindible para una irrigación segura y efectiva.
d) Tirar con delicadeza del pabellón auricular del paciente hacia arriba y atrás en adultos
o abajo y atrás en niños, para alinear las curvaturas del canal auditivo, facilitando así
la entrada del agua irrigada y la salida del sobrante. Se recomienda ayudarse del primer
y segundo dedos de la mano opuesta al oído a irrigar, es decir, si hay que irrigar el oído
izquierdo del paciente utilizar la mano derecha para tirar, y viceversa.
e) Coger el Lantitaps con la otra mano e introducir su punta, el espéculo intercambiable,
no más allá del tercio externo del canal auditivo (< 8 mm generalmente).
f)
Se recomienda apoyar la parte anterior del Lantitaps sobre el tercer dedo de la misma
mano que tira del pabellón, para que haga de tope y así evitar que el dispositivo se
introduzca en exceso en el canal auditivo con la irrigación.
g) Apuntar el especulo a la zona de contacto del cerumen en el cuadrante posterosuperior
del canal auditivo, asegurando de este modo que el flujo de agua no impactará
directamente contra la membrana timpánica minimizando el riesgo de su rotura.
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