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instrucciones Ectram esmeriladoras_Maquetación 1 18/11/11 09:23 Página 7
La mejor manera para afilar una hoja es,
partiendo del centro de la misma, efectuar
desplazamientos de derecha a izquierda y de
izquierda a derecha con lo que conseguiremos
rebajar la hoja de manera uniforme en toda su
longitud. También debemos trabajar siempre
con el ángulo de inclinación adecuado y en el
sentido inverso a la rotación de la muela.
(Ver fig. 6)
Fig. 6
Para un perfecto afilado, es necesario actuar
sobre las dos caras del filo y enfriar la
herramienta cada cierto tiempo en una cubeta
de agua. Si la herramienta que se está afilando
sufre un calentamiento excesivo, el metal pierde
sus propiedades. Los cinceles para madera y
herramientas similares, pueden afilarse hasta
que adquieren un tono azulado.
Selección de una muela
Normalmente se utilizan muelas de grano basto
para rebajar o pulir piezas y muelas de grano
fino para el acabado final de una pieza de
trabajo. Si la superficie no es lisa, comenzar
usando una muela de grano basto hasta que la
superficie de la pieza de trabajo quede llana.
Después usar una muela fina para limpiar la
pieza de restos de material y conseguir un
acabado fino. Usar una muela blanda para
trabajar con metales duros y una muela dura
para utilizar con metales blandos.
En cuanto la muela tenga una tasa de desgaste
superior al 15% (por ejemplo si una muela de
150 mm ha sufrido un desgaste de 22,5 mm), es
necesario cambiarla de acuerdo con el
procedimiento descrito a continuación.
Es indispensable reemplazar la muela usada
por una muela de características equivalentes.
El diámetro máximo no debe nunca ser superior
al de la muela de origen. La velocidad periférica
en metros por segundo debe ser también igual a
la indicada en la placa de características de la
máquina, en caso contrario, se corre el riesgo
de una centrifugación que puede llegar a
romper la muela con el consiguiente peligro
muela
para el usuario.
hoja
Antes de efectuar el cambio, es necesario
asegurarse de la buena calidad de la muela y
soporte
de que no presente ningún defecto. Para ello,
es suficiente someterla a un test de sonido.
Para efectuar este test, las muelas deben estar
secas y limpias, de lo contrario el sonido emitido
podría ser deformado.
Utilizando un instrumento no metálico (mango
de madera de un destornillador, o bien una
maza de madera), golpear ligeramente sobre la
parte lateral de la muela. Un golpe ligero sobre
una muela intacta da una sonido limpio y
agradable. Por el contrario, si el sonido emitido
es sordo o astillado, la muela no debe ser
utilizada, ya que es posible que presente
defectos de fabricación no visibles.
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