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Sistema de Control de la Presión
de los Neumáticos (TPMS)
El
TPMS
no
mantenimiento rutinario y las revisiones de
la presión de los neumáticos.
Utilizar equipos
frecuencias similares a las del TPMS pueden
interferir con el funcionamiento del sistema
de monitorización de la presión de los
neumáticos. Esto puede encender una
advertencia o registrar una avería temporal.
Nota: el TPMS sólo avisa de la baja presión de los
neumáticos, NO los infla.
El TPMS utiliza sensores de presión integrados en las
válvulas de los neumáticos para controlar continuamente
la presión y transmitir los datos a la ECU del coche
mediante señales de radiofrecuencia. Si detecta que la
presión de ese neumático ha bajado por debajo del límite
predefinido por el sistema, se encenderá una luz amarilla
de advertencia en el panel de instrumentos. Para más
información, consulte el apartado 'Panel de Instrumentos'
en la sección 'Instrumentos y Controles'.
Arranque y Conducción
puede
sustituir
el
que
transmitan
El TPMS puede recordarle la baja presión de los
neumáticos, pero no puede sustituir el mantenimiento
normal de los mismos. Para el mantenimiento de los
neumáticos, consulte el apartado "Neumáticos" del
capítulo "Mantenimiento".
Si
se
enciende
funcionamiento del TPMS y aparece el
mensaje de advertencia "Presión de los
neumáticos baja", se aconseja que detenga el coche lo
antes posible, compruebe la presión de los neumáticos y
los infle a la presión correcta. Conducir con los
neumáticos insuficientemente inflados puede provocar un
sobrecalentamiento y una avería de los mismos. Los
neumáticos excesivamente inflados o insuficientemente
inflados se desgastan más rápidamente y un efecto
perjudicial en la conducción. Los neumáticos poco
inflados aumentan la resistencia a la rodadura, lo que, a
su vez, incrementa el consumo de energía. Compruebe
siempre la presión de los neumáticos cuando estén fríos.
Nota: después de cambiar la posición de los
neumáticos o de sustituir un sensor y un receptor
del TPMS, el coche debe circular a una velocidad de
40 km/h durante unos 10 minutos para indicar
correctamente el valor de la presión de los
neumáticos en la posición correspondiente.
el
testigo
de
mal
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