o ERROR DE OPERACIÓN: Asegúrese que todas las juntas están en buen
estado. Reemplace las juntas deshilachadas o comprimidas. No encender la
estufa con la puerta del frente, lateral, o cenicero abiertas.
Controlar la temperatura es el mejor camino para determinar si la estufa tiene un
fuego excesivo. Si Vd. sospecha que su estufa tiene un fuego excesivo contacte con su
proveedor inmediatamente. Los daños producidos por un fuego excesivo no están cubiertos
por la garantía. Los resultados de un fuego excesivo pueden incluir: deformaciones o
quemados de piezas internas, decoloración y deformaciones en piezas externas, y daños
en el esmalte.
NOTA: ¡¡CUALQUIER SINTOMA DE FUEGO EXCESIVO, PUEDE ANULAR SU
GARANTÍA!!
Puede controlar la temperatura de la estufa con un termómetro especial para estufas
situándolo en el centro de la encimera.
A.- PREVENCIONES CONTRA LA CREOSOTA Y SU LIMPIEZA.
Para prevenir la formación de creosota:
1. Mantener la estufa con el control de aire primario abierto completamente durante
30 minutos diariamente para quemar la creosota depositada en el interior de la estufa y del
sistema de evacuación.
2.
Después de recargar leña, mantenga la combustión con el control de aire
primario abierto completamente durante 20 o 30 minutos. Esta manera de operar asegura
de antemano el funcionamiento de la combustión secundaria, la cual, cuando funciona,
minimiza la formación de creosota en la chimenea.
El tubo conector de chimenea debe ser inspeccionado al menos mensualmente
durante la estación de uso de la estufa para determinar si se ha producido la formación de
creosota. Si el residuo de creosota tiene un espesor de 6mm. acumulado debe eliminarla
para reducir el riesgo de incendio.
Si el cristal se ensucia con frecuencia, el rango de temperatura de combustión es
bajo; esto le indica el riesgo de formación de creosota.
El sistema de evacuación de humos debe ser inspeccionado en la conexión de la
estufa y en el extremo superior de la chimenea. Superficies frías tienden a crear depósitos
rápidamente, por esto es importante inspeccionar la chimenea en el final superior, pues es
la zona más fría, al contrario de la conexión de la estufa.
La creosota acumulada debe ser eliminada con un cepillo limpiador específico
diseñado para este uso.
Por esto es recomendable que antes de cada estación de uso se haga una
inspección profesional de todo el sistema, limpiarlo y repararlo, si fuera necesario.
B.- JUNTAS
Las juntas, normalmente deben cambiarse cada 2 ó 3 estaciones de uso,
dependiendo de la utilización de la estufa. Si el sellado de la puerta se pierde, una nueva
junta asegura el sellado adecuado y mejora el funcionamiento de la estufa. Contacte con su
proveedor para que le suministre un juego de juntas para su estufa.
Para reemplazar las juntas de la puerta proceda de la siguiente forma:
1. Primero quite la vieja con un útil o punta de cuchillo.
2. Limpie todos los canales de la junta con un cepillo de alambre, para eliminar los
residuos de cemento y fibras.
4.- MANTENIMIENTO